En la noche de apertura del Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, el domingo, Ricky Martin hizo bailar a los 15 mil asistentes que colmaron el anfiteatro de la Quinta Vergara y acaparó los premios que otorga el encuentro.
Además, durante su quinta visita al tradicional festival chileno, el cantante puertorriqueño saludó al pueblo de Venezuela con un llamado al cese de la violencia en ese país y le dedicó un párrafo a la discriminación de las personas homosexuales.
Con un comienzo bien arriba, con Come With Me y Shake Your Bon-Bon, el show de Martin consistió en un recorrido de alrededor de dos horas por sus más grandes éxitos.
Vuelve, Fuego de noche, nieve de día, El amor de mi vida y Fuego contra fuego, entre las baladas; She Bangs, María, La copa de la vida y Livin' la vida loca, entre las canciones que el público siguió de pie sin parar de moverse, le sirvieron al cantante para llevarse, además de una gran ovación, las Antorchas y las Gaviotas de plata y oro.
"Viña del Mar es un vicio", dijo el artista en uno de los momentos del show, a lo largo del cual cambió varias veces de vestuario y fue acompañado por un cuerpo de bailarines que, sumados al despliegue de luces y la calidad de sonido, redondearon un espectáculo que también tuvo su espacio para un invitado.
Junto a su compatriota, el músico y productor Tommy Torres, jurado del festival, Martin armó una cumbre puertorriqueña para interpretar el tema Tu recuerdo.
"Mucho amor para Venezuela; venezolanos, los quiero", disparó el cantante en otro pasaje de su recital, antes de cantar Por arriba, por abajo. La referencia a los días violentos que vive la nación latinoamericana fue una extensión del llamado a la paz que hizo durante la conferencia de prensa que antecedió a la presentación. "Son increíbles las imágenes que se están viendo. Ni una gota de sangre más, por favor", declaró.
En el mismo ámbito, Martin mostró su alegría por la reciente revelación que hizo la actriz Ellen Page de su homosexualidad. "Estoy feliz porque ella es libre. Simplemente se paró en el escenario libre de caretas y pudo ser ella. Necesitamos más mujeres y hombres como ella que se atrevan a decir lo que sienten; y basta ya de discriminación."
